La lavadora es un electrodoméstico importante de nuestra casa; es el responsable de que nuestra ropa quede limpia y radiante. Por eso, necesita de nuestro cuidado y atención para que funcione como el primer día. Nuestra lavadora es algo muy valioso, pero acumula mucha suciedad después de muchos lavados, por lo que es aconsejable limpiarla a fondo al menos dos veces al año, además de pequeños cuidados de mantenimiento para que no dañe la ropa y deje un buen olor en nuestras prendas.
Nuestro consejo en 5 sencillos pasos:
- Primero, desenchufar la lavadora de la corriente ¡Ojo, es muy importante!
- Limpiar los filtros: Vaciaremos el agua de su interior y retiraremos las pelusas, hilos y los objetos que se hayan quedado acumulados en los filtros.
- Limpiar los compartimentos de restos de jabón y suavizante, sumergiéndolos en agua y lejía clásica durante unos minutos. Luego los secaremos muy bien antes de volver a introducirlos.
- Acabar con el moho de la goma de la puerta. Aplicaremos una mezcla de agua y lejía en un pulverizador. La Antigua Lavandera cuenta con un spray higienizador con lejía ideal para desinfectar esta zona.
- Por último, enchufaremos de nuevo la lavadora. La llenaremos de agua caliente y verteremos un litro de lejía clásica, programando un ciclo de autolavado. Con esto conseguirás acabar con todas las bacterias de su interior.
Espero que os haya sido de gran ayuda nuestros consejos y no olvides de cuidar tu lavadora.