¿Quién dijo que la lejía servía sólo para limpiar? Si tienes camisetas viejas o algún pantalón tejano que quieras cambiar, agarra un pincel y un vasito con lejía Clásica de La Antigua Lavandera, mójalo, y ¡ponte a dibujar!
Bueno, sin prisas, primero ponle un cartón debajo a la tela para que no traspase la lejía y se ponga todo perdido. Luega moja el pincel y haz los dibujos que quieras en la prenda, como explican paso a paso en este blog. Verás que cuando se haya secado, quedará un efecto desteñido la mar de simpático: blanquecino para los tejanos y con matices claros de color en las camisetas negras o de colores llamativos.
Otro método consiste en llenar hasta la mitad un cubo con un chorro de lejía clásica y agua, enrollar la camiseta haciendo varios nudos y empaparla bien dentro del cubo. Es importante que la lejía sea la Clásica, la amarilla, para tener la solución de hipoclorito de sodio pura y sin detergente.
Cuando veas que la camiseta ya ha cogido suficiente color – o perdido, mejor dicho- entonces enjuágala con abundante agua.
En Youtube hay varios tutoriales que muestran cómo hacer este proceso, aunque algunos son mejores que otros. Aquí os dejamos uno que está muy bien explicado, ¡aunque la verdad es que lo mejor del video es el lagarto!
