Cambio de estación, cambio de armario
Con la llegada del otoño llega el momento de sustituir los pareos y la manga corta por las primeras prendas de abrigo. Ha llegado el temido cambio de armario de verano a invierno.
Pero…
¿Cuándo hacer el cambio de armario invierno?
El sentido común debe acompañar esta decisión. Ni a principios de septiembre, que todavía hace calor y se va con el pie al aire, ni a final de octubre, que ya se enciende la calefacción en algún momento de la tarde y se cubre el cuello con un pañuelo para protegerlo.
Un consejo para saber el momento perfecto se basa en saber cuánto frío se siente durante la semana. Si es más de la mitad del tiempo, entonces hay motivos para plantear realizar el cambio de armario de verano a invierno.
Otra cosa es el día concreto para realizar el cambio, uno libre de compromisos es el óptimo. Se necesita emplear tiempo para seleccionar la ropa de forma tranquila y eficiente.
8 Pasos a seguir para realizar el cambio de armario de calor a frío
Estos son los pasos:
- Vaciar el armario encima de la cama.
- Separar las prendas en 3 montones: los atuendos que no se van a utilizar más, la ropa que seguro se utilizará en el futuro, las prendas que se duda qué hacer con ellas.
- Lavar la ropa que se quiere guardar.
- Embolsar todo aquello que se quiere donar, regalar o tirar.
- Retirar del armario antiguos aromatizantes y antipolillas.
- Lavar el armario a fondo.
- Airear durante al menos 12 horas la ropa que se va a colocar en el armario, pues ha estado embolsada 6 meses.
- Colocar la ropa de temporada otoño/invierno de forma organizada, colgada o doblada.
¿Qué hacer para que la ropa del armario no huela mal?
Algunas veces, al coger prendas de ropa limpia del armario se nota un olor extraño, desagradable, un “olor a guardado”.
Cuando se realiza el cambio de armario de verano a invierno, es el momento perfecto para tomar precauciones y evitar el mal olor de la ropa.
Ventilar el armario
Una recomendación importante es ventilar de vez en cuando el armario. De esta forma se evita el desagradable olor a cerrado o a humedad que impregna algunas prendas.
Lavado y desinfección del armario
Para lavar a fondo el armario, tan solo es necesario un cubo de agua, un jabón neutro y un paño húmedo. Puedes utilizar un detergente quita olores o detergente que mejor huele o un jabón que se adapte al material de tu armario.
Es recomendable una buena desinfección, puesto que algunas veces pueden quedar restos de comida que hayan caído de los bolsillos o de algún bolso y se pudran en los siguientes meses.
Para conseguir un buen resultado se puede pulverizar con un producto de limpieza o spray desinfectante sin lejía, así se elimina cualquier bacteria.
Una vez limpio la colocación de saquitos llenos de arroz por los rincones y en la esquina de cada cajón, ayudará a absorber la humedad.
Antes de colocar cada prenda en su sitio, asegúrate de haberla aireado suficientemente y de que esté en perfectas condiciones. Dóblala o cuélgala según convenga por su tejido.
¿Cómo guardar la ropa que se retira del armario?
Es muy importante guardar bien limpia la ropa que se retira del armario hasta la próxima primavera o verano.
Aunque no se vea ninguna mancha, es probable que alguna prenda esté usada una vez y el tejido contenga restos de olores.
Lo más eficaz es atender a estas dos recomendaciones:
- Lavado de la ropa:
Un detergente universal diario con agua micelar garantizará purificación y eliminará los malos olores.
Estas prendas se volverán a usar la próxima temporada. Por ello se recomienda usar el Detergente Universal Aromaterapia, un aroma relajante a base de lavanda y ámbar.
Su fórmula proporcionará a tus prendas una fragancia duradera y los aceites esenciales que contiene, además de desinfectar la ropa te aportarán beneficios como la relajación.
El cuidado de la ropa antes de guardarla ayuda a conservarla impecable para usarla el próximo año.
- Clasificación de la ropa:
Es importante clasificar las prendas antes de guardarlas. Este hábito ayudará a encontrarlas fácilmente cuando se vuelvan a necesitar.
Toda la ropa debe estar completamente seca para poder almacenarla en cajas transpirables, preferentemente de tela.
Si no hay demasiado espacio en la vivienda se pueden utilizar bolsas al vacío o las mismas maletas que se han utilizado para viajar, puesto que estas están inoperativas hasta las próximas vacaciones.
El mejor espacio de la casa para guardar la ropa es el menos húmedo: altillos, bajo la cama o un vestidor.
Trucos caseros para evitar malos olores en el armario
Si se quiere añadir algún ambientador casero en el armario para asegurarse de que se eliminan los malos olores, estas son algunas ideas:
- Saquito con granos de café tostados: olvídate del olor a tabaco.
- Atadillo de ramas de canela: perfuma y decora.
- Bolsita de tela con lavanda o romero: aporta un aroma natural.
- Aceites esenciales: impregna el fondo de armario con el aroma que se prefiera.
- Pulverizador: mezcla agua con dos cucharadas de bicarbonato, agita y añade tres cucharaditas de suavizante que mejor cuida la ropa. Viértelo en un pulverizador y ¡ya lo tienes!
Este último consejo tiene muy buena acogida. Te invitamos a que lo pruebes en los armarios o cajones de la ropa de cama.
Cuéntanos en comentarios tu experiencia con el cambio de armario de verano a invierno. Nos encantará leerte.