El extractor de la cocina es posiblemente el electrodoméstico que más trabaja… y junto con el horno, del que más nos olvidamos a la hora de la limpieza. ¡Pero cometemos un error! La campana filtra aire sucio cada vez que cocinamos, y ese vapor, junto con la grasa del guiso, queda en la campana, y la ensucia, disminuyendo su potencia y acumulando bacterias.
Consejos para limpiar la campana de la cocina
La buena noticia es que para evitarlo sólo hará falta limpiarla una vez al mes, siguiendo estos sencillos pasos:
- Llena una olla de agua y el zumo de tres limones y ponla a hervir con el extractor encendido. El vapor de limon ayudará a despegar la grasa del filtro.
- Cuando acabes, apaga y desconecta el extractor. Quita los filtros de la campana y déjalos reposando en agua con desengrasante.
- Mientras, limpia la campana por dentro con una bayeta y lejía. Recomendamos el Limpiahogar de La Antigua Lavandera, perfumado con limón, para neutralizar los olores de la campana.
Nota: Asegúrate de que la bayeta que utilices no esté empapada, sino húmeda. Recuerda que estás limpiando un aparato eléctrico, y por mucho que durante la limpieza esté desconectado y no haya peligro, ¡tenemos que asegurarnos de que esté seco al encenderlo!
¡Suerte y buena limpieza! Gracias por tus comentarios…
